Para James, el más inteligente de los novatos que están a punto de graduarse en la CIA, trabajar en la Agencia es una forma de escapar de la rutina diaria. Lo que ignora es que, antes de convertirse en Oficial de Operaciones, tendrá que superar un entrenamiento secreto para adquirir los conocimientos necesarios que harán de él un experto veterano. A medida que el jefe Burke le va mostrando los entresijos y las reglas del juego, James aprende rápidamente, pero, al mismo tiempo, se enamora de Layla, una de sus compañeras. Cuando James comienza a cuestionarse su papel en la Agencia, Burke le asigna una misión especial que consiste en desenmascarar a un topo.