Nora Wilder trabaja en un selecto hotel del centro de Nueva York. Hace años que cumplió los treinta y, como su madre le recuerda constantemente, aún sigue soltera. A menudo tiene citas que la dejan con la frustrante sensación de que jamás encontrará a un hombre tan perfecto como el marido de su amiga Audrie. Y un día aparece Julien (Melvil Poupaud), un francés soltero, apuesto y encantador… Aunque tiene mucho miedo a fracasar de nuevo, de manera impulsiva decide ir a París y comprobar si su breve y apasionada relación con Julien es algo más que un fugaz romance.